14 ago 2017

Paradoja en Renfield Street de Lluís Rueda

Portada de Paradoja en Renfield Street de Lluís Rueda (imagen del propio autor)

Fue hace un tiempo, pero veladas como esa no se olvidan. La tarde comezó mal. Llegué corriendo a Chronos y la presentación ya había empezado. A partir de entonces todo mejoró y acabó siendo una jornada redonda: charla agradable con amigos, debates sobre literatura y espirituosos para endulzar el alma. ¿Se puede pedir más? Pero vayamos al principio. Cuando tomé asiento LLuís Rueda hacía un buen rato que exponía con asombrosa profusión de detalles el diorama en el que transcurre su novela "Paradoja en Renfield Street". Reconozco que me sentí desbordado, abrumado incluso, y que temí abordar la novela por miedo a no entender un carajo. Fue una sensación pasajera, un simple aleteo membranoso en la ominosa oscuridad. De la pasión de Lluís surgió la llama del conocimiento y poco a poco comencé a vislumbrar de qué iba todo aquello: una aventura épica, de esas que no dan tregua, con acción a raudales y un montón de persecuciones. Pistolas, revólveres, sables, fusiles, todo vale en la guerra contra lo sobrenatural cuando tus rivales son vampiros, autómatas o mujeres-serpiente. La portada de "Paradoja en Renfield Street" no da lugar a equívocos: estáis ante una portal dimensional único, tenéis frente a vosotros el agujero de gusano que da acceso a una de las aventuras más fabulosas jamás narradas.

Sinopsis:

Glasgow, año 2000. La ciudad está a punto de sufrir un cataclismo sin precedentes. Poco quedará de su icónico carácter gris, lluvioso y melancólico cuando un jodido vórtice preñado de seres malvados se materialice en el mismo corazón de la urbe. Edgar Grainger, entrañable truhán que pretende pasar por caballero, se presenta en casa de Andy Telfer. Mr Grainger, agente literario de profesión, irrumpe en el piso con su bigotillo ralo, un parche en el ojo y armado con un habano para sacar de la duermevela al joven Telfer, que a partir de entonces será nombrado (ipso facto y ex profeso para esta aventura) capitán de las Highlands. El triángulo lo completa la dulce Sarah Aveling, una misteriosa joven nacida en 1886 que luce la piel nacarada y esos ojos verdes que tanto abundan en las novelas decimonónicas.

En medio del caos que ha generado esa úlcera cósmica que regurgita monstruos sin parar los tres protagonistas deciden abandonar el apartamento de Renfield Street. Su objetivo es llegar a Dumbarton y a la mansión Overtoun. Allí parece residir el mal que los azota, un poder supremo envuelto en un halo de misterio capaz de disolver el plano real transformándolo en un páramo digno de la peor pesadilla de H.P. Lovecraft. De camino a su destino deberán abordar un tren, matarán un montón de bhampairs (los primos más feos y chungos del conde Drácula) y tendrán tiempo incluso para recitar poemas; no en vano una vorágine cósmica no es excusa para olvidar los buenos modales y para hacer gala del arte del coqueteo. Las alimañas demoníacas que van tras ellos no dudarán en machacar a quien se interponga en su paso. Deberán cuidarse pues los nuevos compañeros de nuestros valientes protagonistas: John Duffy, el sij maquinista denominado Mr Ranjiv, el joven Archibald, el posadero Mervin Erskine, la anciana Vanora Ramsay o el pequeño Dougal, un niño con poderes excepcionales, una especie de rastreador psíquico. Y esto es solo un aperitivo de lo que esconde el libro. Llegados a este punto ya os podéis imaginar lo que os espera.


...era como si la caja de Pandora
se hubiera abierto echando
a los cuatro vientos
de la noche nipona
los hechizos más infames
y las pócimas más ominosas.

Opinión:

En la página 96 tenéis una breve sinopsis de cómo se desencadena el meollo: 'El 11 de junio de 1900, la feria ambulante de Ignatius McIndoe llegó a la ciudad de Dumbarton...'. El tal McIndoe proponía a los asistentes viajar en el tiempo, todo un hito en los albores del siglo XX. Sin duda algo salió mal, sino no tendríais ante vosotros este libro. Concebido inicialmente como una trilogía (un suicidio literario según su autor/editor) tras varios años de gestación y síntesis Lluís ha logrado dar forma a una novela que ante todo pretende ser un grato entretenimiento, pero que se acaba convirtiendo en una auténtica oda a la literatura de género y de aventuras. Las referencias a maestros son constantes (Yeats, Paul Féval, Guy Endore, Jules Verne, Steward Edward White, Ambrose Bierce o Lord Dunsany entre tantos). Pero no solo hay referencias literarias; también las hay pictóricas, musicales,... No os asustéis. Lo bueno de "Paradoja" es que tiene múltiples capas de lectura e interpretación en función de lo que el lector desee profundizar, aunque puedo aseverar que el gusanillo de acudir a la wikipedia le podrá incluso al lector más vago.

Nada es gratuito en esta novela (o eso quiero pensar): la Golden Dawn, el conde Otani y Gerard Doufrie están ahí porque tienen su función, su momento clave, y porque Andy Telfer o Lluís Rueda, o quizás ambos, así lo han decidido. La mente del autor está preñada de mitos y leyendas oscuras que convierten esta novela en una hipnótica obra que conjuga lo especulativo, lo esotérico y la tradición pagana (y esto tan bien parido no lo he escrito yo, lo dice un personaje del libro). No hay descanso en sus más de quinientas páginas. Como buen hacedor de historias el autor tiende a múltiples vericuetos y senderos tortuosos, dando giros que nos llevan sí o sí por los derroteros que él desea. Quizás el viaje a través de Oprobia, ya en el tramo final del libro, no me ha resultado tan atractivo como el resto, pero reconozco que he estado muy enganchado durante la mayor parte del relato. Existe además el aliciente de los grandes personajes, esos que dejan huella: era fan de Nathaniel Hawthorne y tras leer el libro reconozco que lo soy todavía todavía más. ¡Qué puñetas! Incluso me vienen ganas de gritar al viento (aunque solo sea para ver qué sucede): ¡Yo te invoco, Ignatius McIndoe!

- paradoja cósmica a medio camino del horror y la aventura -
★ ★ ★ ★
Ficha:

"Paradoja en Renfield Street" - Lluís Rueda
Editorial Hermenaute - Colección Caronte, 2 (978-84-944902-7-9) - 2017
555 páginas

No hay comentarios:

Publicar un comentario